Finalizando el año, los rojiblancos avanzaron a octavos de final de la máxima competición europea como segundos de grupo, tras los turineses, donde les esperaría el Liverpool; al tiempo que Oblak se convertía en el portero con mayor número de partidos dejando su portería a cero de la historia de la Liga (arrebatándole el récord a otro rojiblanco, Abel Resino, atletico de madrid camiseta que lo detentaba con 95 partidos).